He estado todo el verano mirando con ojillos las faldas de botones de Stradivarius, hasta que finalmente cayó esta blanca (y veremos si no voy a por una en el color clásico del denim: el azul). Me encanta el aire setentero que desprenden, ese aire que, sin duda, invade esta temporada otoño-invierno. Sí señores, esta temporada volvemos a las campanas, las faldas de botones, los maxi-chalecos, el ante,... es como si hubiéramos viajado en el tiempo y apareciéramos en medio de aquella década que tantos cambios trajo.
Volviendo al look, como se trataba de un acontecimiento algo más "especial" no quise darle a la falda abotonada un aire demasiado informal, así que opté por un crop-top negro con escote bardot (otro must, pero esta vez de la temporada veraniega y que aún tiene algunos coletazos que dar). La bicromia del look se rompía un poco con los zapatos y el bolso, ya que de otro modo me hubiera parecido un outfit demasiado aburrido (e incluso sin chispa).
A destacar que este verano he intentado usar la plancha solo he momentos puntuales y si habéis seguido las RRSS habréis podido comprobar que he llevado la melena de forma similar a como os la muestro en las fotos, con mi rizo natural y dejada caer a un lado. No se deciros por qué, pero este aire desenfadado me ha conquistado este verano :P.
Crop top: Fira de Xàtiva
Falda: Stradivarius
Zapatos: Stradivarius
Bolso: Primark
Pulsera: Addicted to jewelry
¿Qué os ha parecido el look? ¿Os gustan las faldas con botones? ¿Cómo la combinaríais vosotros?