¡Hola chicos!


Después de esta vorágine de fiestas, luces, regalos, visitas familiares, toca la vuelta a la realidad. A los que les gustan estas fiestas, parece que un sentimiento de nostalgia por los buenos momentos vividos, emerge con la vuelta a la rutina, a los estudios, a un trabajo alejado de tu familia. Y por otra parte, está el grupo de aquellos que no le tienen demasiado amor a estos días, por circunstancias X. Son muchos sentimientos, además de la alegría, los que afloran estos días y no todo el mundo los sobrelleva de la mejor forma.

Conclusión, ya seas de un grupo o de otro ¿Qué os parece si nos proponemos unos principios básicos para empezar el año (de verdad), sin esa carga negativa que podemos llevar con nosotros?

1. Plantear objetivos: No podemos negar que plantearse un objetivo (ya sea grande o pequeño) es un aliciente que nos da energía en nuestro día a día. Pero no hagamos lo mismo que todos los años, que todos sabemos que el que más y el que menos, ha incumplido mil y un objetivos como: "este año voy a hacer más ejercicio", "este año voy a comer más sano", "este año dejo de fumar"... y largos etc.
Planteémonos un objetivo que sepamos que vamos a cumplir, y en el que vamos a poner todo nuestro empeño y seguro que disfrutaremos con ello. Hagámoslo y punto, el camino será lo más divertido.



2.Liberarnos de gente tóxica: ¿Qué mejor momento que empezar el año liberandonos de aquella gente que nos absorve la energía vital? Sinceramente, es uno de los grandes placeres que nos puede dar la vida: Mandar a tomar viento a esa gente que lo único que hace es mermar nuestra mente emocional. Os lo recomendamos, porque acertaréis al 100%.




3.¿Hacer balance del 2014? ¿Para que? Sinceramente, lo pasado, pasado está. En 365 días podemos haber sufrido un montón de experiencias malas y otro montón de experiencias buenas, que lo único que nos han hecho es enriquecernos como personas. ¿De que nos sirve anclarnos en el pasado? Podría ser uno de los objetivos que os comentábamos en el primer punto. VIVAMOS EL PRESENTE. El pasado y el futuro en este momento no existe.